domingo, 26 de octubre de 2008

Semana colombiana en Delhi

Como ya os comenté, durante estos últimos días se han celebrado diversos eventos dentro de la primera semana cultural de Colombia en la India. He aquí el resumen de lo que ha sido una fantástica semana. Enhorabuena a los organizadores y a todos los participantes por tan genial resultado.



- Miércoles 22: Una gran película, "Satanás", basada en un hecho real, la masacre de Pozzetto, que sucedió en Bogota en 1986. Impactante película que os recomiendo encarecidamente. Allí me encontré con Fabián, un percusionista colombiano que estará aquí en la India unos meses, y que ya conocí en la fiesta de CouchSurfing. Un gran tipo, con el que da gusto tener una conversación, y que además me regaló un magnifico libro, "La rueda de la vida", de Elisabeth Kübler-Ross. Fabián eres un grande, a ver si nos vemos pronto, espero.



- Jueves 23: Concierto de "Zona Prieta", un grupo colombiano de la región de Antioquia, que con sus ritmos latinos puso el auditorio en pie. Podéis encontrar más información y escuchar algo de su musica aquí Su estilo de música no es de mis favoritos, pero tengo que reconocer que me divertí bastante, que es lo que cuenta.





Al final, acabamos todos bailando en el escenario, con conga incluida.





- Sábado 25: Todo un clásico del cine colombiano, "La estrategia de caracol", con la presencia del director, Sergio Cabrera, todo un lujo. Si aún no la habéis visto, ya tardais. Sublime.
- Domingo 26: Y la guinda final anoche, fiesta colombiana en el jardín de un hotel. De nuevo con concierto de Zona Prieta, pero esta vez en un ambiente algo más distendido. Por fín pude conseguir una camiseta (de la talla de Gorang, asi que para él), y un CD del grupo.


Aquí con Joe, uno de los componentes del grupo

Y dentro de un rato me piro unos días a la región de Rajasthan, a casa de Hemindra, hasta el viernes. En mis planes, visitar al menos Jaipur y Pushkar. Ya os contaré que tal da de sí mi primera escapada fuera de Delhi.

¡Hasta pronto!

viernes, 24 de octubre de 2008

Una vuelta por Connaught Place

Ayer viernes era mi dia de descanso, así que aproveché para ir a la embajada de España a registrarme. Allí me atendió Isabel, una señora muy amable que lleva ya unos 30 años en el país. Muy maja y atenta.

Aprovechando que tenía tiempo libre, desde allí me dí un paseo de una horita (las distancias son muy engañosas en los mapas de Delhi) hasta Connaught Place, donde había quedado con Nitesh, un chico que ha estado 4 años trabajando en Córdoba, y que tuve el placer de conocer anteayer.

La caminata se me hizo bastante liviana. Es al pasar Indian Gate cuando el número de pesados comienza a aumentar: el típico que tras intercambiar cuatro palabras contigo, te intenta convencer para que visites no se cual tienda..el que te quiere limpiar (e incluso arreglar) los zapatos..los conductores de "rickshaws" pitándote y ofreciéndote llevarte (uno de ellos se bajó, me dijo que era su cumpleaños, y que me daría suerte el montar en su vehículo). Si, chavales, por desgracía, aquí el extranjero es visto como un monedero con patas, aunque hay muchas excepciones.

Nitesh, por ejemplo, es una prueba de que no se puede generalizar. Un chaval muy amigable, abierto, inteligente, y crítico con su país, siempre con animos de que las cosas puedan mejorar. Esperemos que si. Más tarde se nos unió su amigo Bharat, un personaje interesante, conversador y dicharachero, muy buen rollo.


A la izquierda, el cordobés de la India, y a la derecha su colega. Ojo al del bigotazo en el centro.

Conaught Place es el centro neurálgico de Delhi, la plaza central, con un parque en el centro (Central Park). Un lugar donde se concentran multitud de tiendas de ropa, restaurantes selectos, y también mucha mendicidad y miseria. Es terrible el contraste que existe en este país en este aspecto. Ancianas con lepra pidiendo una rupia al lado de escaparates donde resplandecen ostentosos trajes, niños famélicos moribundos tirados en el suelo, a punto de ser pisados por unos zapatos de Gucci, personas con los miembros amputados que salen de donde menos te lo esperas en busca de tu compasión.... estas situaciones son las que, de verdad, más trabajo me está costando y me costará sobrellevar. Creo que este tema merece una entrada aparte, quizás más adelante.







Un poco antes de volver al sur, Nitesh me propuso probar gulab jamun, una especie de bolas hechas con leche condensada y harina, bañadas en caramelo, y que se pueden encontrar en la calle. Sabroso descubrimiento (como me quedé sin batería en el momento de la foto, aqui va una de internet..que viva el google!!)



Y otro cosa que hasta ayer ignoraba. Resulta que en algunos puntos de la ciudad, la Policía de Tráfico tiene instalados unos puestecillos, en los que se puede calcular lo que cuesta un "rickshaw" según el punto al que vayas, y pagar por adelantado. Un sistema de prepago, vamos. Luego ellos te dan un recibo, paran a un conductor (muchos suelen poner excusas para no llevarte, porque saben que salen perdiendo) y le dicen que te lleve. En mi trayecto, todo salió bien y el conductor me llevó a donde quería sin refunfuñar, pero hay casos en los que te pueden dejar tirado, a saber donde. Así que aseguraos que el tio sabe el sitio a donde vais, y que lo veis conforme. Los „rickshaws“ estos también merecen tema aparte, vaya mafia.

jueves, 23 de octubre de 2008

Mi hábitat (segunda parte): De casa a la oficina

Aunque el escenario principal de mi trabajo sean las aulas, ubicadas en el mismo edificio donde vivo, todos los días por la mañana voy a la oficina central, y luego vuelvo de nuevo después de las clases, y hasta las 5 o las 6 de la tarde. No sólo voy para fichar, sino también para hablar con Laura, mi directora, sobre como me van las cosas, contactar con otros profesores, y preparar las clases y materiales (y de paso, subir las fotos al blog, que mi conexión inalámbrica no da para mucho).

Este es el camino que sigo cada mañana, desde que salgo de casa hasta la susodicha oficina:


La puerta del portal

Atravieso el portico de mi calle (que raro suena, pero es verdad, aquí hay calles residenciales, que las cierran de noche)...



...miro a la derecha..



..luego a la izquierda..



..y cruzo con cuidado (¿os acordais de aquel videojuego de la ATARI, de un cangrejo cruzando una calle?), hacia la calle que tengo justo enfrente, pero antes me paro a visitar mi puesto favorito...



..y tras saludar al amigo de Hemindra, que está justo al lado...



..me tomo un zumo de naranja, que a esas horas entra fenomenal (me he acordado del penúltimo post que puso mi querido Borja en su blog :))



Sigo todo recto, hasta toparme con esta obra, que me gustaría ver terminada antes de irme, a ver como les queda.



Giro entonces a la derecha...



..y tras andar unos 40 metros, llego por fín al Instituto Hispania.



A esas horas (un poco antes de las 9), el único que está es Gorang, viendo alguna película de Bollywood, antes de que venga la secretaria.



Como veis, está bastante cerca, lo que me ahorra el transporte y aguantar los atascos y la contaminación diariamente. Un lujazo, vaya.

Anécdota del día: justo en el momento en el que estaba publicando esto en el blog, he conocido a Nitesh, un chaval indio que ha venido a buscar trabajo como profesor de español, y que estuvo 4 años en Córdoba..que casualidad :)

martes, 21 de octubre de 2008

Mi hábitat (primera parte): mi casa

Desde que comencé con las clases, la avalancha de novedades y el shock de los primeros días, ha ido dejando paso a una rutina, entendida en el sentido positivo. Es decir, una estabilidad, un día a día que me va facilitando la adaptación y el encontrar poco a poco mi lugar aquí.

Aprovecho pues, esta aparente calma entre la tormenta de acontecimientos que han ido ocurriendo (y los que están por venir), para hablar un poco de mi entorno más cercano, en este caso del lugar donde vivo, un apartamento facilitado por el propio centro donde trabajo, y que es algo tal que así:


Aquí una vista desde la puerta


Otra desde la cama


Y aqui el baño

Como podéis ver, no está nada mal, y más si tenemos en cuenta que en un país como la India, en una habitación como la mía duermen normalmente cinco mínimo. Por tanto, me siento privilegiado. Aparte, yo siempre lo dije, mientras que tenga una cama, una ducha y un váter, todo lo demás es accesorio.

Pero lo mejor de todo es esto...


He aquí de nuevo mi habitación..


..y ésta es una de las clases donde trabajo...


..ale hop!!..totalmente adosadas :)

¿Se puede pedir más? Ni imagináis lo que esto supone en una ciudad como Delhi, con mogollón de tráfico, atascos, accidentes, polución... mejor no puede haber salido la cosa.

En cuanto a mi vida durante estos días, aparte de las horas de trabajo, tanto dando clases como preparando lecciones y materiales (ahora estoy metido con un programa de formación para profesores), el resto del día aprovecho para irme a alguna actividad cultural de las muchas que hay estos días. Especialmente me estoy hinchando de ver películas (muy buenas, por cierto) por el morro (quitando las 50 rupias por trayecto hasta la sala de cine al "rickshaw" de turno). Estos días, por ejemplo, tiene lugar la semana colombiana en la India, con un acto cultural diario (mañana me voy a otra peli y el jueves a un concierto).

Y nada, que las clases están saliendo bien, Gorang sigue cocinando genial, y que desde el primer día no he dejado de sentirme mejor y mejor :)

sábado, 18 de octubre de 2008

Fiesta de CouchSurfing

Anoche estuve en mi primer encuentro (y espero que no sea el último) entre miembros de CouchSurfing en Delhi. ¿Qué qué es CouchSurfing? Es un proyecto sostenido por una comunidad de usuarios (generalmente, gente que suele viajar y abierta al intercambio cultural) que..bueno..que tienen una maravillosa web donde encontrar toda la información que necesitéis: CourchSurfing.com (y así me ahorro soltaros el rollo). Yo soy miembro de esta comunidad desde este pasado verano, aún en Lituania, así que quisiera seguir participando en este tipo de encuentros, y ésta era una oportunidad buenísima de socializar con gente local y otros extranjeros en mis mismas circunstancias (aunque la mayoría que había por allí eran viajeros que estaban de paso).


El de la izquierda es Lambert, alemán afincado en Delhi, uno de los organizadores del evento. Todo un personaje.

La fiesta estuvo genial, la organización perfecta y la atmósfera muy agradable. Hubo de todo, barra libre (en la que todos pusimos nuestro granito), música en directo, DJ´s, deliciosa comida india, y sobre todo, cantidad de gente estupenda (nos juntamos al menos 90 personas), algunos con proyectos muy interesantes, y con los que me gustaría mantener el contacto en el futuro.


Por ejemplo, el chaval de la izquierda es Jamey, un vegetariano que está a punto de empezar junto a 3 amigos, un viaje en bicicleta por Asia. Tiene también un blog (aún vacio): www.veganbetweenyourlegs.com


La banda en pleno solo de guitarra

Y aparte de tener la oportunidad de socializar, de paso también me pegué mi primera escapadita de fin de semana. Todavía no había tenido tiempo ni oportunidad de salir en este plan (aparte, para disfrutar de la vida nocturna de aquí, necesitas conocer a los contactos adecuados, no es tan fácil). Hasta ahora sólo había salido un par de veces, pero en plan tranqui. Y es que con la cosa de que trabajo sábado y domingo (sólo libro los viernes) tampoco es plan de estar hecho un gambitero.


Antes de que lo diga otro que yo me sé...si, tengo que limpiar el objetivo de vez en cuando...


Si, he vuelto a dejarme la perilla

viernes, 17 de octubre de 2008

El Karwa Chauth

Hoy se ha celebrado la festividad del Karwa Chauth, en la que las mujeres casadas guardan ayuno desde que amanece hasta el atardecer, para asegurar así que sus maridos vivirán muchos años. Estas mujeres ni comen, ni beben, ni tan siquiera tragan saliva, para mostrar de esta manera su capacidad de sacrificio por el hombre.


Aquí tenemos a Pushpa, nuestra simpática relaciones públicas, ayunando pero contenta

Durante este día, las esposas visten sus mejores galas, y suelen adornarse con sus mejores joyas y brazaletes, y se pintan las manos con henna. Es habitual que durante estos días los salones de belleza estén a rebosar.



Antes de la puesta de sol, tiene lugar una ceremonia en los soportales de las casas, en la que las mujeres se sientan en corro y escuchan a una sacerdotisa, que les cuenta la leyenda en la que se basa el Karwa Chouth. Hubo una reina, llamada Veeravati, a la que su hermano engañan, haciéndole comer en un dia de ayuno. Esto provoca la muerte de su esposo, el rey. La reina desconsolada acude a los dioses Shiva y Parvati para pedirles que resucite a su marido. Éstos le conceden su deseo, a condición de guardar ayuno de forma estricta.





Tras esto, las mujeres preparan una bandeja con dulces y velas, vuelven a casa a encontrarse con su marido, y esperan juntos la salida de la luna. Cuando esto ocurre, las esposas deben mirar de forma alternativa a la luna y al marido, para así mostrar su devoción y deseos de buena salud y fortuna al marido. Mientras éste le da de comer con sus propias manos. Finalmente, la mujer toca los pies del marido como muestra de amor y respeto.



Viendo todo esto, que me parece muy bonito, me pregunto si los maridos tendrán también la misma devoción y el respeto hacia sus mujeres. No es cuestión de generalizar, y seguro que hay miles de parejas maravillosas e igualitarias en la India, pero por lo que he leido, aquí las mujeres lo tiene muy dificil para encontrar su lugar en la sociedad. La tradición pesa mucho, y en esta cultura, suelen depender mucho del hombre, que ejerce su autoridad. Espero que las excepciones sean cada vez más, y las esposas puedan tratar a sus maridos de igual a igual.



Más información sobre el Karwa Chauth, en su página oficial.

miércoles, 15 de octubre de 2008

Empiezan las clases

Tras una semana dedicada casi plenamente al proceso de adaptación, llegó la hora de dar el callo y volver a las clases de español. He empezado esta misma mañana con un grupo de 7 estudiantes (muy buen número), y tendré con ellos 4 lecciones a la semana, de 3 horas cada una. Un curso intensivo, vamos.


De izquierda a derecha, Unnati, Sonal, Deepak, Devkaran, Sonia, Ameet y Janvi

Son de nivel inicial, pero ya han dado los 8 primeros temas con otro profesor indio. Me han dado una primera buena impresión, en general parecen bastante aplicados y participativos.





Ya iré contando que tal van evolucionando. De momento muestran buenas actitudes, y además se les ve con sentido del humor. Me gusta la atmósfera de clase.



Una cosa que seguro que me va a rayar más de una vez, es la forma que tienen los indios de asentir, de decir que "si". En lugar del movimiento de la cabeza de arriba abajo, ladean la cabeza de un lado a otro, y parece que están diciendo "no". Así que ya os podéis imaginar cada vez que les pregunto "está claro?", "habéis entendido?"...y ahi todos ladeando la cabeza, que me raya que no veas, pero al final me acabaré acostumbrando, que remedio :)

martes, 14 de octubre de 2008

Gorang, chico para todo

Hoy quisiera dedicar la entrada a una persona que, gracias a su estimable ayuda, está haciendo que las cosas aquí sean mas fáciles. Su nombre es Gorang (no Goranga como escribí hace unos días), un chico de Calcuta de lo mas eficiente y espabilado, que trabaja en Instituto Hispania haciendo diversas funciones.. desde hacer recados hasta atender algunas llamadas antes de que la secretaria llegue, pasando por hacer fotocopias, preparar cafés, organizar materiales, etc. Un fenómeno.



Vive también en el mismo edificio que yo, y aparte de su labor en el Instituto, me ayuda en mis quehaceres diarios, cocinando, limpiando, lavando la ropa... Por ello le pago un salario extra (aparte de una cantidad semanal para la compra), con el que ambos salimos beneficiados. El obtiene una cantidad, que para el es un buen salario, y a mi me ahorra mucho tiempo,aparte de que prepara unos platos riquisimos, como este:



Algunos me han preguntado "¿y por que no te lo haces tu por tu cuenta, como siempre?" Bien, es verdad que se me hace muy raro eso de que alguien se encargue de algo que siempre he hecho durante los últimos años, pero yo lo veo como que le estoy dando un trabajo, que quizás dificilmente encontraría en otra parte (y a saber en que condiciones). Me consta que para él es una gran ayuda esta oportunidad que le doy, y por tanto lo miro por ese lado. No se trata de querer vivir como un señor ni mucho menos, simplemente es una ayuda mutua.



No habla casi nada de ingles, pero poco a poco comenzamos a entendernos mejor. Como digo, es un chaval muy inteligente, y aprende muy rápido. Seria un punto si consiguiera que aprendiera algo de español, aunque sea lo básico. Y por supuesto, me encantaría aprender de el algo mas de hindi (aunque la lengua que más usa es el bengalí).


Aquí, con Hemindra, echándome una mano en la traducción hindi-español

domingo, 12 de octubre de 2008

Visitando Delhi

El pasado sábado pude disfrutar de mi primera visita turística a la ciudad, y mi primera incursión también en el norte, otro mundo si lo comparamos con la zona sur, donde vivo. Esto es un remanso de paz y tranquilidad si lo comparo con el barrio de la Gran Mezquita, por ejemplo.

En general, fue un día bastante completo, que tengo que agradecerle a Madhuvan, otro profesor español, un tio super interesante cuya novia es española. Un encanto de persona con el que podría pasar horas y horas hablando de lo que sea, en especial de religiones, que de eso sabe un montón. Y además conduce la moto con prudencia :)

Nuestra primer punto a visitar fue Jama Masjid, la mezquita más grande de la India, construida en 1650. Abren desde el amanecer hasta que se pone el sol, pero durante las horas de oración (5, 13, 15 y 17), la entrada a turistas está prohibida. El acceso es gratuito, aunque hay que pagar unas 200 rupias si quereis hacer fotos como estas:







Por supuesto, hay que descalzarse antes de entrar, y no se puede pasar con pantalones cortos (te dejan una especie de pareo en la puerta en ese caso).



Desde la puerta oriental, corría un canal que llegaba hasta el Fuerte Rojo (otro de los monumentos más importantes de Delhi, pero que dejamos para otra ocasión), y que hoy día esta tomado por cantidad de vendedores ambulantes. Aquí y en los alrededores de la mezquita es donde se encuentra el auténtico espectáculo.





Para almorzar fuimos al restaurante Karim, en una callejuela justo enfrente de la entrada sur de la mezquita (puerta 1). Es uno de los sitios más conocidos y con más solera de la zona. Me encantó el Karim Roll (una especie de mini-kebab) y el Butter Chicken, acompañado de naan, un tipo de pan hecho con levadura amasada con leche y cocida al horno. Todo riquísimo y a un precio bastante económico.



De vuelta al sur, y tras pasar uno de los momentos más desesperantes, y a la vez más divertidos que he tenido nunca (imaginad por un momento, lo que es ir montado detrás en una moto, en medio de un atasco demencial, y sentir el aliento de un caballo en la nuca), paramos en la Puerta de la India. Esta mole, construida en la epoca colonial, conmemora a todos aquellos soldados indios muertos en la Primera Guerra Mundial.



Un poco antes de caer la tarde (aquí a las 18 ya empieza a oscurecer) y como colofón final a un gran día, visitamos el complejo de monumentos Qutb, declarado Patrimonio de la Humanidad, y donde destacan la mezquita Quwwat-ul-Islam, la más antigua de la India, y por supuesto, su minarete, el Qutb Minar, de 72 metros de altura.






Aquí tenemos a Madhuvan, que aparte de profesor es un guía estupendo

En el patio central se halla un pilar de hierro forjado en el siglo III, el único resto del templo hindú que se erigía en el lugar de la mezquita. A pesar de su antigüedad, no tiene ningún resto de oxidación..curioso. Según se dice, si abrazais la columna de espaldas, y vuestras manos se tocan, entonces vuestros deseos se harán realidad.



Por desgracía, hay una valla que impide el paso, y no se os ocurra pasarla si no queréis sufrir la ira del segurata, vaya elemento. El hijo de mil padres estuvo a punto de pegarle a un niño con un palo por saltar la valla; una escena lamentable, pero por lo que he oido, eso de pegarle a los niños no está tan mal visto aquí en la India.